ALHARILLA.

Justo es hacer honor a cuanto nos rodea, si esta Peña Romera nació con sus ojos puestos en Nuestra Señora de la Cabeza, no podemos olvidar que existe en la campiña otra advocación de la que nunca nos pudimos desligar: ALHARILLA.

Es la Señora del llano, aquella de tez blanca que no te resistes a mirar, y desde nuestros inicios, llegado Mayo, Alegría Serrana aún con la miel en los labios de esa ultima romería en Sierra Morena, emprende camino de nuevo hasta su encuentro.

La Virgen es la misma, eso no lo duda nadie, y como buenos romeros años tras año agasajamos a la Patrona de Porcuna como solo la Señora se merece, son otros 25 años más haciendo camino, rezándole, cantándole, etc, etc.

Es una manera mas de vivir otra romería, y he aquí que con el tiempo Aharilla ha pasado de ser una romería más a una romería especial, hechos reales lo demuestran, Ella lo quiso así, se obro el milagro (para todos nosotros lo es), y eso . . . ., eso nunca lo podremos olvidar.

Por eso cuando llega Mayo todo se hace especial, como más grande, mas extenso, y los miembros de esta Peña nunca dejaran de agradecer a la Reina de los cielos, llámese “De la Cabeza” o “Alharilla” su protección.

A modo de ejemplo este podría ser el relato de una romería pasada, en el fondo es lo que vivimos años tras año, los que conocen mi peña saben a que me refiero, cuando lo estén leyendo se verán reflejados en el relato ellos mismos, y a quien no conozca esta fiesta “invitado esta”.   



Ha llovido mucho desde que se tomo esta foto

Durante todo el día la ermita se convierte en un hervidero de personas que nada mas llegar al llano lo primero que hace es visitar a su Reina, rostros cansados que tras los excesos de los días anteriores han conseguido su meta. Es el momento del rezo, rezo silencioso dentro de cada corazón, pero que por momentos se siente fluir, el romero no puede resistir la tentación y acercándose a Ella la piropea con gracia, con la yema de los dedos roza su manto y con sigilo lanza un beso al aire con la esperanza de que este llegue hasta su cara. Los vivas a la Virgen no se hacen esperar y así lentamente hasta llegar el medio día momento en que los más impacientes tomaran hueco en un varal.

Arjonilleros que bien lo tenéis: tan solo dos pasos nos separan de nuestra casa para poderlo ver, sin quererlo podréis oírlo, intuirlo, y sentiréis ese calor que se escapa por la puerta lateral de la ermita. Los romeros ya están todos, ya nada les detiene y todos a una la levantan al cielo, la mecen, la vitorean, faltan mas de tres horas para sacarla y la Virgen ya no para, el rezo se hace cante, el cante una plegaria, y en los corazones de cada uno un deseo: verla entre los olivos con el sol en su cara.

            Se oyen los cohetes, la campana lo dice todo: son las cinco de la tarde y la Virgen sale, que es la hora de mecerla, que se entere toa la gente, que en esta hora mágica se haga un esperar, y que así todos juntos levantemos un altar en el Llano de Alharilla para Ella pasear.             

 La procesión se inicia con un destino concreto “El Humilladero”, es allí donde Ella se manifestó. Los peregrinos llenan todos los aledaños del Santuario, solo se escuchan los vivas a la Virgen, el redoble del tambor, el cohete y una campana tocar.

 Mientras tanto:

Un romero llora, lo hace con emoción, hoy cumple 5 años desde que Ella le salvo, camina ante la Virgen tocando un varal, quiere ser costalero y de Ella mas cerca estar.

“ Dejadme un ratito hermanos, que yo también la quiero llevar”.

Y entre camisas sudadas de los hijos de Porcuna, el hueco no se hace esperar. Manolo agarra el varal y con orgullo mirando a su padre le pide que le deje estar. Sus ojos ya no ven, las lágrimas le cegaron, pero pensando en todos los suyos se deja llevar, la mece, le grita, la mima con todo el cariño que solo a una Madre se le puede dar.

Ya de vuelta hasta su ermita la Virgen se resiste a entrar, lluvia de pétalos y claveles la hacen parar. Los peregrinos se despiden otro año más, se acuerdan de los suyos, de los que no han podido estar.

 Ese niño de 5 años ya la tiene que dejar, y entre suspiro y suspiro a la Reina de los Cielos solo con mirarla todo su amor le da, y le grita con cariño:

                                                              

            “! Madre de Alharilla, déjame estar

            Otro año nuevo, agarrado a tu varal.

            Que mis penas son más llevaderas

            Si en mis hombros yo te puedo llevar ¡”

Y la Virgen se despide, poquito a poco va entrando hasta su altar.

 Muy cerquita, al lado de la ermita hay alguien más, mi cofradía de Arjonilla y vestida de fiesta “Alegría Serrana” también esta, esperan con nostalgia dejar de oír la campana tocar, iniciar el camino de vuelta y en el pueblo a los cuatro vientos proclamar: 

Romeros no la dejéis, que sola no puede estar.

Rezadle cada día y visitadla en su hogar.

Vivid la Romería con toda la intensidad

Pero durante el resto del año “de Ella no os podéis olvidad”.